La vida está llena de situaciones que debemos enfrentar y confrontar. Dios ha dispuesto que así sea y tenemos que elegir si debemos quedarnos estancados a mitad del camino, o debemos seguir para buscar nuevos propósitos en este feliz Año Nuevo 2022. Es el desafío de la vida que siempre nos lleva a cumplir nuevos objetivos.
La vida es un viaje maravilloso, pero no estático. Aceptar que la vida es un cambio permanente nos permitirá vivir mejor el aquí y el ahora. Debemos renovarnos y no permanecer por mucho tiempo en la ya famosa zona de confort.
Tenemos un nuevo año por delante, 365 días de retos que debemos afrontar con optimismo, entusiasmo, pasión e ilusión. En este proceso de cambios, hay que aprender a mirar más allá para ver lo verdaderamente importante. Lo que se fue ya no volverá. Ahora tenemos ante nosotros una nueva etapa para descubrir, para explorar, para conocernos mejor y, sobre todo, para apreciar y disfrutar.
El tiempo escapa a nuestro control y fluye sin cesar. Es así como en un rápido parpadeo tenemos frente a nosotros un año nuevo más, un momento ideal para meditar y reflexionar; echar una mirada al año que acaba de terminar, soñar con el que comienza y emprender el vuelo en busca de nuevos horizontes.
Las cosas que pasaron se quedan allí: fijas, inmodificables; con sus momentos buenos y sus fracasos; con sueños realizados y otros tantos que se perdieron en el vacío. El año comienza incierto, así como todo lo futuro, como todo lo que empezó ayer, como todo lo que comenzará mañana.
Pero de algo podemos estar seguros: que cada instante se presenta como una buena oportunidad, la cual depende en gran medida de nuestra prudencia y de las buenas decisiones que tomemos, mismas que sólo podremos llevar a buen puerto si ponemos en práctica el discernimiento, enraizado en los Ejercicios Espirituales de san Ignacio de Loyola. Con esto en mente, seremos capaces de elegir cuidadosamente entre muchas opciones si vemos la vida desde la perspectiva de Dios y con ello, distinguir entre el bien y el mal, y la mentira de la verdad.
Para experimentar esta renovación en tu corazón, no te pierdas nuestras Publicaciones Anuales 2022, la mejor compañía para vivir la Palabra de Dios.
¡Feliz Año 2022!