Category: Consuelo

La importancia de saber consolar

La importancia de saber consolar

Consolar proviene del latín consolare y en la práctica, significa la acción de tranquilizar a una persona cuando se encuentra afligida por alguna situación. De esta manera, se puede ofrecer consuelo a un enfermo que padece algún dolor, al que enfrenta una situación familiar sumamente difícil, o a un amigo que atraviesa por un problema físico, emocional o de otra índole. Cuando un ser querido o incluso nosotros mismos pasamos por un trance complejo, lo último que queremos oír son palabras que nos piden que lo ignoremos o que le restemos importancia. Lo que necesitamos es comprensión y no que minimicen nuestro sufrimiento. En la actualidad, existe una buena cantidad de personas muy solas, pues vivimos en una sociedad extremadamente individualista en donde las máquinas y las nuevas tecnologías han sustituido el calor humano, por lo que consolarnos y consolar a los demás tendrá cada vez mayor importancia. Nos hemos olvidado de que hay ocasiones en que necesitamos a la gente, porque es importante escuchar al otro, prestarle atención sin juzgarle. En este punto, es importante señalar que no existen fórmulas mágicas para consolar a una persona que sufre. Cada uno de nosotros tiene una manera de asumir el dolor, y al mismo tiempo, esa misma persona no experimenta el sufrimiento de la misma manera frente a todas las circunstancias de la vida. Así pues, la única condición para consolar eficazmente a otra persona es tener la disposición genuina de querer hacerlo.

¿En qué consiste consolar? Se trata básicamente de saber escuchar, pues nada funciona si no se sabe escuchar a quien sufre. Y escuchar es algo sumamente difícil para muchas personas. Pero consolar también significa ofrecer compañía afectuosa, respeto y apoyo. Para que todo eso sea sincero, es importante demostrarlo con gestos y actitudes. Es estar dispuesto a aceptar el dolor del otro y estar junto a esa persona mientras dura la tormenta. Cuando la vida nos trata mal, el contacto físico y los gestos ayudan a establecer un vínculo y pueden dar tanta o mayor sensación de cercanía y de seguridad que las mismas palabras. Finalmente, lo más importante es abrir nuestro corazón a los sentimientos y necesidades de la otra persona. Definitivamente, no hay mejor consuelo que saber que alguien más tiene la mejor voluntad para entendernos. Si deseas saber más sobre este tema, te recomendamos leer El pequeño libro del consuelo y los siguientes libros: